Tracklist:
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01 - Dash And Blast
02 - We Flood Empty Lakes
03 - A Song For Starlit Beaches
04 - Illuminate My Heart, My Darling!
He oído decir por ahí que "la música es la mayor creación del hombre".
De hecho, tal vez sea lo único bueno que la humanidad ha podido crear, pero me parece casi utópico que se haya podido llegar a tanta perfección, no solo en los detalles, si no en el fondo , en el alma de éstas obras maestras que agasajan a nuestros oídos, gracias a Yndi Halda.
Ésta banda proveniente de Canterbury, Reino Unido se caracteriza por el ambiente evocador y atmosférico que logra en sus temas que duran largos minutos ( alguno llegan a los 19), tiempo suficiente para que nuestras mentes emprendan aquel viaje imposible hacia el fondo motor de nuestros recuerdos.
Se puede apreciar un logrado trabajo de complementación entre ambas guitarras, el violín no es cortante, si no más bien como un bálsamo para el alma, la batería y bajo usan el silencio como un instrumento más, es decir, saben elegir el momento preciso para callar o para irrumpir con pasión.
Un dato que no podría dejar de lado es que Yndi Halda es una palabra en nórdico arcaico que significa "Disfruta de la Felicidad Eterna", es decir "Enjoy Eternal Bliss", el nombre de éste disco.
Un dato que no podría dejar de lado es que Yndi Halda es una palabra en nórdico arcaico que significa "Disfruta de la Felicidad Eterna", es decir "Enjoy Eternal Bliss", el nombre de éste disco.
Me encantaría que escucharas estos temas cargados de perfección al final del día, cuando los automóviles ya no hacen tanto ruido, cuando todos están dormidos, para que en la paz de la oscuridad, puedas pensar que después de todo el día no fue tan horrible.
Aunque para mi, lo ideal sería poder disfrutar de estos himnos que rozan lo celestial estando lejos de las civilizaciones consumistas bajo la lluvia de luz de las estrellas, sin automóviles que hagan ruido, sin paneles publicitarios que reduzcan tu visión del cielo, solo disfrutando de lo eterno que puede ser la no-presencia del hombre.
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